"Tormenta
Solar Severa ¿Cómo prevenir?". Decálogo de la Asoc. Española de Protección
Civil para los Eventos Climáticos Severos
Nota:
versión íntegra del folleto original de autoprotección familiar resumido y
divulgado en Europa Press y otros medios).
La Asociación
Española de Protección Civil para los Eventos Climáticos Severos y la
Prevención Nuclear, formula estas diez recomendaciones básicas para una
sencilla preparación familiar en caso de tormenta solar severa (tormenta
geomagnética); útiles también, en definitiva, para mejorar la capacidad de
respuesta familiar ante otros riesgos severos de distinta índole.
1-
Verificar con calma la concreta situación que nos afecta.
Ante
todo conservar la calma y proceder con tranquilidad a verificar que realmente
se ha producido un apagón generalizado a todos los niveles (4 factores de
comprobación: a- electricidad doméstica, b-telefonía móvil, c-emisoras de radio
y d- internet) y no una interrupción puntual por otra causa distinta, como
un apagón normal de corriente doméstica en el barrio que no afectará, por
ejemplo, al funcionamiento normal de la telefonía móvil o las antenas de radio;
o un problema técnico de tu operadora móvil que no afectará, por tanto, a la
iluminación de tu cocina, etc.
Una
tormenta solar, incluso una severa, no tiene por qué dar lugar necesariamente a
ningún "colapso" y, de hecho, puede limitarse a dar lugar a otros
efectos perjudiciales pero "menores" para nosotros; en tanto que sin
apenas consecuencias directas en nuestro día a día (como apagones de radio, o
afectación de algún satélite).
Afortunadamente
nuestra atmósfera y magnetosfera nos protegen las 24 horas del día. Lo vienen
haciendo de forma efectiva desde siempre.
De
hecho, puede que incluso de haberse producido un efecto electromagnético
realmente severo que consiga alcanzar la superficie de la tierra y hasta
produzca alguna distorsión en sistemas eléctricos éste se produzca en latitudes
mucho más al norte de nuestro país.
O que
incluso de llegar a afectarnos, cosa nada fácil, tan sólo afecte alguna región
localizada de nuestra redes de gran distribución y transformadores y que el
resto de la red no se vea afectada en cascada tampoco. Esto es exáctamente lo
que sucedió, por ejemplo, con la conocida tormenta geomagnética de Quebec,
Canadá, en 1989, que es cierto que dejó sin fluido eléctrico hasta a 6 millones
de personas durante casi 24 horas, pero no afectó al resto del país desde dónde
fue movilizada de inmediato toda la asistencia necesaria a la población y todos
los medios necesarios para la reparación de la red dañada.
En
definitiva: incluso con una tormenta geomagnética severa la situación y
afectación de las infraestructuras fundamentales de las que dependemos puede
variar dependiendo de la combinación de muy distintos factores geomagnéticos, y
es necesario determinar con toda serenidad, y certeza, el concreto escenario en
el que nos vemos inmersos.
Si ha
podido haber algún tipo de aviso anterior por parte de las autoridades se nos
habrá informado con antelación sobre como proceder con los cortes de luz y gas
y la desconexión de la red de nuestros aparatos.
En
todo caso, de llegar a producirse sin aviso, no está de más recordar que es
prudente acordar el corte del suministro de la propia comunidad en tanto la
situación se corrije, - por lo menos el de casa si después vamos a dejar
el lugar -. Y verificar con prontitud, además, si se ha podido producir algún
pequeño incendio eléctrico fortuito para sofocarlo, pero sin emplear agua.
2-
Plan familiar preestablecido.
De
modo que permanecer tranquilamente en casa a la espera de asistencia exterior -
o valorar que ésta no llegará a corto plazo- será nuestra primera decisión
familiar para gestionar esta situación.
Para
ello, en primer lugar, y en toda circunstancia, hay que sintonizar la radio y
seguir al tanto de las noticias que puedan llegar así como de las indicaciones
de las autoridades y Protección Civil, que en caso de emergencias estarán en
todas las frecuencias.
Como
pauta general si tras las primeras 72 horas tras el evento no hay signos de
recuperación - no llega asistencia alguna, ni hay noticias por radio/internet
ni nadie sabe nada con certeza -, significa que el impacto en las
infraestructuras nacionales ha podido ser severo y de amplio alcance geográfico
(indeterminado, en todo caso) y es recomendable reunir a nuestros familiares y
dirigirse hacia alguna zona menos poblada y más al sur, donde la red ha podido
resistir mejor.
En
particular, si además de a esos 4 factores de comprobación aludidos se ha
afectado, adicionalmente, a nuestros vehículos y otros aparatos electrónicos
independientes de la red, como baterías de portátiles, o transistores a pilas
hay que entender que el carácter del pulso electromagnético natural
(EMP) asociado al evento habrá sido particularmente severo. No
estaríamos entonces ante ningún escenario como el de Quebec en 1989 y en ese
caso mejor partir lo antes posible. De todas formas algo así nunca se ha
verificado, y que algo de tal alcance pudiese suceder por el momento sólo es
una teorización.
Y si
se vive en las inmediaciones de una infraestructura crítica sensible a lo que
hay que estar pendiente, siempre, será a lo establecido en su plan de
emergencia y a las instrucciones de los responsables de protección civil de la
zona sobre el concreto modo de actuar y de valorar la situación allí.
Sea
como sea, si nos vemos envueltos en una situación de fallo de uno u otro
alcance, hemos de prevenir la posibilidad de que las llamadas para contactar
con otros de nuestros seres queridos puedan no funcionarán.
Por
ello lo primero necesario es tener previamente establecido:
a)
un plan de comunicaciones y
b) un
par de sencillas pautas para la reagrupación familiar desde el
principiodel escenario para,
c)
llegado el caso, dirigirse a un lugar seguro familiar de
referencia previamente establecido juntos - fuera de la ciudad y a una
distancia prudente de otras instalaciones críticas sensibles -.
Es
importante que el conjunto de ese plan sea “refrescado” de vez en cuando entre
los miembros de la familia y que todos sepan a donde dirigirse para el
reagrupamiento inicial y el desplazamiento posterior de ser necesario.
Es
importante que el desplazamiento hasta dicho lugar seguro se produzca siempre con
toda normalidad y observancia de las normas de circulación. Con mucha más
prudencia en realidad: hay que prestar especial atención a cortes y obstáculos
imprevistos, o semáforos y otros elementos de señalización electrónica que han
podido dejar de funcionar.
Es
importante prestar especial atención a todo lo relativo al acompañamiento de
menores, familiares con alguna discapacidad o que requieran de alguna atención
especial y ancianos de avanzada edad.
Es
importante disponer de cosas como un mapa de carreteras actualizado y
bicicletas por cada miembro (en portabicicletas, p. ejemplo) como medio
secundario, ya que pueden resultar de utilidad.
Es
importante que para poder realizar dicho desplazamiento en condiciones
adecuadas hayamos preparado antes los recursos básicos que nos permitan estar
bien una vez alcancemos ese "LUGAR SEGURO FAMILIAR DE DESTINO". Por ello la
mayoría de los recursos de este decálogo los guardaremos directamente en dicho
lugar seguro familiar de destino; pero unos pocos recursos los tendremos en
casa, directamente a mano y siempre con nosotros.
Un
ejemplo sencillo de las cosas para tener siempre a mano en casa son las
"mochilas listas para salir" recomendadas a los ciudadanos por
el programa "Prepárate Madrid" del ayuntamiento de la capital(http://www.madrid.es/UnidadesDescentralizadas/Emergencias/Preparate... ) añadiéndole algo de
comida no perecedera por persona para más de 3 días y los elementos que se
indican en los puntos 3 y 4 de este Decálogo ("Agua" y
"Protección ante los elementos").
Simplemente
con visitar alguna gran superficie comercial, alguna cadena de tiendas
deportiva/de multiaventura se pueden encontrar una amplia variedad de
posibilidades para cubrir los preparativos indicados a continuación.
3-
Agua y medios de potabilización portátiles.
Contar
con una reserva de agua mineral directamente a mano y medios de potabilización.
Beber
agua potable es la segunda necesidad humana después de respirar (mínimo 1,5
litros día/persona, según actividad) , y un apagón generalizado de estas
características podría suponer semanas de afectación mientras el flujo se
reestablece.
Esto
es muy importante, y debe ser la primera preparación material de todas a
adoptar a causa de la denominada regla del 3 en situaciones de emergencia: Una
persona no puede resistir más de 3 minutos sin aire, 3 días sin agua potable,
ni 3 semanas sin comida.
Disponer
de suficiente cantidad de agua potable y segura a mano en función del número de
personas en peligro y durante el tiempo suficiente, es un factor crítico en
cualquier emergencia. No lo podremos subrayar lo suficiente.
Por
ello, además de contar con unas garrafas de agua mineral de
reserva,directamente disponibles en el lugar seguro de reagrupación familiar,
recomendamos la adquisición de algún medio seguro de filtración automática
portatil como los “life straw” familiares, o similar, o como una cantimplora de
montaña por persona de las que incorporan filtros potabilizadores. Métodos que
resultan especialmente seguros en tanto que no requieren ni de ningún tipo de
manipulación - más allá del simple llenado -, ni de dosificación, ni de tiempo
espera, reduciendo por tanto el riesgo de que el proceso potabilizador se haga
incorrectamente y genere un riesgo adicional para la salud.
Tales
métodos de potabilización no sustituyen, en todo caso, al sentido común de
examinar adicionalmente que en las inmediaciones que el agua que pretendemos
tomar no proviene de aguas estancadas o resulta contaminada de alguna forma con
heces o animales en descomposición.
4-
Protección personal ante los elementos.
Contar
con un buen saco de dormir testado y esterilla por cada miembro de la familia, ropa
de abrigo (gorro, guantes, bufanda), no sabemos si el apagón temporal puede
suceder en invierno como sucedió con la mencionada tormenta geomagnética de
Quebec. Tampoco sabemos cual podría ser su concreta duración ahora (días,
semanas, meses...) lo que hace especialmente recomendable contar con medios
autónomos de calefacción en el lugar de reagrupación familiar. La pequeña
tienda de campaña familiar habitual de excursiones y camping.
Gafas
polarizadas (gafas de repuesto también si se necesitan) y un pañuelo de tela
grande de distintos usos (mascara improvisada, gorra para el sol, prefiltro de
partículas para el agua, pequeñas heridas...). Tapones para los oidos. Botas
para caminar aptas para la lluvia, así como un poncho para la lluvia resulta
así mismo especialmente recomendado. Chandal, vaqueros y similar y mudas y
calcetines de repuesto. Algo de hilo, aguja y algunos botones no ocupan lugar.
Junto
a ello otros elementos adicionales de protección personal como algún repelente
efectivo de mosquitos y otros insectos, bien sea en spray repelente/pulsera
bien algún modelo de repelente tipo colgante por ultrasonidos de eficacia
probada que protege las 24 horas del día, habitualmente en un par de metros de
radio, y de forma continuada durante meses hasta que se agote su pila botón.
Un
buen cinturón, capaz de resistir cargas y esfuerzos, puede ofrecernos así mismo
múltiples usos para asegurar/sujetar carga, ayudarse a superar pequeños
desniveles formando una cadena humana o para evitar perdidas en condiciones meteorológicas
adversas.
5-
Reserva de alimentos no perecederos.
Contar
con una reserva de alimentos no perecederos proporcional al grupo familiar
transportada o transportable al lugar de reagrupación.
El
"EMP Act América" y la Protección Civil de Portugal han
recomendado un mínimo de 2 semanas de suministros por persona; la Asociación
Española de Protección Civil para los Eventos Climáticos Severos recomienda que
se comience por esas 2 semanas pero que se vaya ampliando paulatinamente dicha
cantidad hasta alcanzar un mínimo de 2 meses/persona como mera reserva de
maniobra ante el riesgo potencial de larga duración de la situación
generada.
Hay
que tomar en cuenta que, en general, las recomendaciones tradicionales de
preparación para fenómenos estándar de "72 horas" (3 días) en los que
"alguien" llegará para ayudar pueden quedar muy desfasadas ante el
carácter único que pueden alcanzar eventos excepcionales de estas
características, y deben ser ampliadas.
En la
selección de alimentos siempre se deberá tomar en consideración
incompatibilidades y preferencias alimenticias y partiendo de elementos
altamente nutritivos como lentejas y garbanzos cocidos, arroz y harina,
sardinas/atún en lata (siempre lata mejor que cristal, y siempre abre fácil en
lo posible); complementar con leche y patata en polvo, pastillas de caldo,
tomate natural triturado, galletas comunes, y algún complemento alimentario
como el alga "espirulina platensis" – promovida por Naciones Unidas
para situaciones de emergencia por su alto poder nutritivo y adquirible en
centros dietéticos –. Sal (de la yodada y fluorada), aceite de oliva y miel
como reguladores de ingesta cotidiana. Especias como ajo, canela o albahaca.
Abundante fruta variada en almibar y en formato infantil de potito.
Una
cucharadita diaria de cacao puede ser un antidepresivo natural y posee
distintos efectos beneficiosos; infusiones como la tila, la manzanilla o el té
son polivalentes, muy ligeras y de larga conservación.
Lo
importante, en general, es seleccionar aquellas unidades que den de si el mayor
consumo preferente posible en etiquetado y - fundamental - llevar una pequeña
libreta de control anotando fechas y cantidades. Su almacenaje deberá ser en
lugar fresco, seco y al amparo de la luz, a poder ser en contenedores plásticos
cerrados de tamaño mediano que los proteja de insectos y que permitan su rápido
manejo llegado el caso.
Otro
buen complemento son los multivitaminas (con multiminerales), siempre que su
ingesta se mantenga dentro de las cantidades recomendadas y se acompañe siempre
del suficiente aporte líquido diario (sopena de daño a los riñones). Refuerzos
de vitamina C y calcio resultan en todo caso imprescindibles ante cualquier
posible escenario de larga duración.
La
reserva de alimentos debe incluir piensos para nuestras mascotas, baratos y de
larga duración por lo general.
Es
imprescindible disponer de algún tipo de equipación de camping gas y al menos
olla/sarten/pasapuré para la preparación de alimentos y cazo polivalente de
latón y cubierto por persona.
6-
Botiquín familiar ampliado.
Puesta
al día del botiquín familiar siempre de conformidad a los medicamentos aptos
para los miembros de la propia familia e incorporando cosas como algún
antibiótico, antiinflamatorio, aspirinas, paracetamol, antidiarreico, y suero
oral. Algún antiestamínico genérico y abundantes gasas estériles y yodo para
desinfección. Banda adhesiva multiusos omnifix u otra, y puntos americanos o de
aproximación. Alcohol para esterilización. Crema hidratante y bicarbonato.
Se
deberá prestar nuevamente especial atención a contar con una provisión de
reserva suficiente respecto de las necesidades especiales de menores, personas
de avanzada edad, o aquellas otras con dolencias crónicas (cosas como
antialérgicos específicos, inhaladores para asma de reserva, medicación para la
diabetes, hipertensión, etc).
Instrumental
básico como un termómetro de galio (ni mercurio, ni electrónico), tijeras
pequeñas, gotero para dosificación, guantes esterilizados desechables o
pequeñas pinzas para extracción, son otros elementos de utilidad.
7-
Manual técnico en papel.
Contar
con un manual en papel guardado en bolsa hermética, con técnicas básicas de
orientación, acampada, técnicas de potabilización auxiliar, nociones de
primeros auxilios, etc, como el manual "Wiseman" adoptado por
protección civil y fuerzas armadas en varios países del mundo y que se puede
comprar en la FNAC y otras librerías, o en su defecto un sencillo manual Scout
u otros similares.
8-Medios
de higiene personal.
Contar
con una reserva de medios de higiene personal y limpieza en el lugar de
reagrupación así como un pañuelo extra de tela (larga duración a diferencia de
toallitas húmedas/clinex), una esponja por persona (en especial para limpieza
humedecida si hay poca agua), papel wc, jabón de glicerina, lejía (de la
expresamente apta también para potabilización según etiquetado como medio
auxiliar), friegaplatos y elementos sustitutivos de las compresas femeninas
(como el "Mooncup" y otros disponibles en el mercado); Es importante
prestar una especial atención a una cantidad suficiente de pañales en caso de
contarse en el grupo con niños de corta edad. Fundamental contar con medios
suficientes de higiene dental que no pueden faltar, y de desparasitación ante
piojos.
También
es necesario atender a la desparasitación oral y collar de repuesto para
nuestras mascotas.
9-
Varios útiles de alto valor en emergencias (cerillas, transistor, navaja
multiusos, linterna y otros).
Contar
con algunas otras pequeñas herramientas útiles, desde medios de encendido (como
3 o 4 paquetes de cajas de cerillas pequeñas de las normales y baratas,
repartidas en bolsas herméticas lo que, por un par de euros, nos garantizará
numerosos encendidos sencillos por unos gramos de peso, que habrán de ser
manejados siempre con la debida prudencia), a una simple linterna, o un
sencillo transistor - mejor si ambas usan la misma pila (recargable) y tenemos,
además, reserva extra y un cargador de pilas solar que les dé servicio -
disponible a precio económico y en varios modelos en el mercado -; un par de
pequeños "rad sticker", monocular para avistar y pequeña brújula, una
pequeña navaja multiusos (con función de abre latas), un silbato para hacer
señales. Parches y bombín para la bicicleta.
Distintos
elementos para pequeñas confecciones: Cinta americana, plástico cubretodo como
el que se usa para pintar una habitación; bolsas de basura y un simple tubo de
pequeño diámetro de un metro pueden ser muy polivalentes; bridas y cordel
resistentes; herramientas de bricolaje de las que habitualmente se tienen en
casa como alicates o destornillador.
Que
no se olvide incluir lápiz y papel para cualquier posible anotación o mensaje.
Una baraja de cartas, juegos de familia, pelota de tenis o algún pequeño
elemento similar no ocupa lugar, en especial si hay niños y mascotas.
En
una tormenta solar no es previsible, en principio, la afectación de elementos
electrónicos de alimentación independiente, o que en ese momento se encuentren
desconectados de la red.
Con
todo, como prevención simultanea tambien ante un EMP - p. ejemplo, tecnológico
- de igual manera que el almacenaje de alimentos tiene sus requerimientos
básicos, el almacenaje de radio, linterna y otros elementos electrónicos o
eléctricos "de reserva" debería seguir una recomendación fundamental:
tenerlos guardados por rutina en una sencilla "estantería-caja
faraday" casera, como la que explicamos en la correspondiente nota.
Esa
misma estantería puede ser, además, el mejor lugar de la casa para tener una
copia de seguridad de nuestros archivos informáticos, por ejemplo en un disco
duro externo o un pendrive, donde cabrían, con facilidad, una enorme cantidad
de documentación personal escaneada, o materiales pdf con indicaciones de
utilidad práctica, o incluso un viejo portatil sin uso que poder alimentar
llegado el caso con los cargadores solares, aunque sea para un par de horas al
día para consultarlo.
10-Chapas
personales, dinero efectivo y documentación.
Llevar
consigo fotocopia en bolsa con cierre hermético de la documentación personal y
familiar más esencial: documentos de identidad y pasaporte, libro de familia,
cartilla médica, veterinaria, fotografías, pólizas de seguro, estractos
bancarios y escrituras de propiedad, así como algo de dinero en efectivo ya que
sería probable que los cajeros no funcionasen o se pudiesen ver desbordados.
Es
además recomendable que todos los miembros del grupo porten algún tipo de
identificación personal (colgante/pulsera) con su nombre y apellidos, su grupo
sanguíneo, posibles alergias médicas y alimenticias - de existir - u otras
enfermedades crónicas, así como datos de contacto hacia otros miembros del
grupo, muy en particular los niños.
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