lunes, 10 de octubre de 2011

BODAS CELESTIALES. UN AMIGO Lo que permite ir del Corazón del Uno al Corazón de todos 28 septiembre 2011 con audio.

• Publicado por Lucia Montaño Ferrer el octubre 9, 2011 a las 3:34am en Título ejemplo

"El Corazón del Uno se vuelve el Corazón de todos, desde el instante en que el Corazón del Uno se hace Uno. Hacerse Uno, es poner fin a la conciencia separada y la conciencia fragmentada, estabilizándose en lo que se ha llamado la Conciencia Turiya. Ese principio llamado la Unidad, es algo que debe concienciarse y no vivirse solamente, a nivel de la cabeza o de los conceptos, sino es un elemento que debe vivirse de manera real, concreta, perceptible y Vibratoria, en la Conciencia. La rotura del Velo pone fin a la Ilusión de la separación. El rasgado del Velo permite comprender y Vivir el Amor, que une cualquier vida en Libertad, que une cualquier vida en la misma Esencia, permitiendo poner fin al velo de la Ilusión y poner fin sobre todo, a lo que se llama la Separación. En la hora de las Bodas de Luz, en el momento en que algunos Hermanos y Hermanas encarnados en la carne, comienzan a vivir las primicias de esta Unión con el CRISTO, con la Luz Blanca, con la Unidad, es tiempo de entender y expresar lo que significa verdaderamente vivir el Corazón, vivir la Unidad y pasar del Corazón del Uno al Corazón de Todos."




Original en francés.
http://www.autresdimensions.com
Canalizado: Jean Luc Ayoun
Transcripción: Véronique Loriot
Traducción: Susana Milán
http://mensajes-del-espiritu.blogspot.com
http://mensajes-del-espiritu-2010.blogspot.com

Para escuchar el audio haz clic aquí

http://www.yakitome.com/data/1458055779/yak_25BeXCXrRVHq55AFSrbKep4...

Soy UN AMIGO. De mi Corazón a vuestro Corazón, en Amor y en Unidad, Hermanos y Hermanas, vengo para expresar ciertos elementos concernientes al Corazón y voy, más exactamente a hablaros, de lo que permite ir del Corazón del Uno al Corazón de todos.

El Corazón del Uno se vuelve el Corazón de todos, desde el instante en que el Corazón del Uno se hace Uno. Hacerse Uno, es poner fin a la conciencia separada y la conciencia fragmentada, estabilizándose en lo que se ha llamado la Conciencia Turiya. Ese principio llamado la Unidad, es algo que debe concienciarse y no vivirse solamente, a nivel de la cabeza o de los conceptos, sino es un elemento que debe vivirse de manera real, concreta, perceptible y Vibratoria, en la Conciencia. La rotura del Velo pone fin a la Ilusión de la separación. El rasgado del Velo permite comprender y Vivir el Amor, que une cualquier vida en Libertad, que une cualquier vida en la misma Esencia, permitiendo poner fin al velo de la Ilusión y poner fin sobre todo, a lo que se llama la Separación. En la hora de las Bodas de Luz, en el momento en que algunos Hermanos y Hermanas encarnados en la carne, comienzan a vivir las primicias de esta Unión con el CRISTO, con la Luz Blanca, con la Unidad, es tiempo de entender y expresar lo que significa verdaderamente vivir el Corazón, vivir la Unidad y pasar del Corazón del Uno al Corazón de Todos.

Los preceptos y los conceptos que voy a expresar, están más allá de datos intelectuales, de cualquier voluntad, de cualquier voluntad de Bien o de cualquier comprensión intelectual, pero se inscriben de manera indeleble en el sentido de lo que hay que Vivir cuando el Corazón Vibra el Canto de la Unidad. En ese momento, como he dicho, las barreras, las separaciones desaparecen, no puede haber discriminación entre uno mismo y todos los demás (todos los Hermanos, todas las Hermanas y toda la vida, de una manera general). La Conciencia en ese momento, estabilizándose en el Corazón del Uno, permite vivir la Unificación de todas las Conciencias, pero por supuesto, las otras Conciencias no tienen la Conciencia de lo que vivís vosotros. Y así es como lo he vivido durante mi vida, a cada minuto y a cada respiración, haciendo que mi Conciencia permanezca estable, con toda lucidez y a cada minuto (sin por eso escapar a mi condición humana o escaparme en los Samadhi más intensos), manifestando esta Conciencia de la Unidad, para que mi Corazón, en ese momento (que se había convertido el Corazón del Uno) se haga el Corazón de Todos. Es decir que todos los Corazones, todas las Conciencias se encontraban, de manera real y viva, en mi propio Corazón.

Vivir el Corazón del Uno es efectivamente, en Conciencia y realmente, poner fin al mecanismo de la separación, de la división, terminando cualquier Ilusión de que los seres estén separados. Lo que está separado, por supuesto, son las personalidades. Y la conciencia que está establecida en la personalidad, mantiene de manera artificial y voluntaria (aunque sea inconsciente), una separación. Este principio de separación permite además, desarrollar ciertos elementos. Estos elementos, se llamen profesión, se llamen lo afectivo, tengan por nombre programa de vida, o karma, participan de una manera indeleble, en la separación de la personalidad de las otras personalidades. Establecerse en el Corazón del Uno (y no volveré sobre las diferentes conciencias que corresponden, si os parece bien, en la personalidad o en el Uno), en todo caso establecerse en el Corazón y Vivir el Uno, vivir el Corazón del Uno, permite realizar en sí, la alquimia del fin de la separación y permite en ese momento, vivir al otro totalmente en el Interior de Sí.

La ausencia de distancia en la Conciencia, permite realizar lo que se llama y denomina el Amor y la Luz. Mientras que la personalidad experimente otra personalidad, solo puede haber Sombra, solo puede haber separación y por supuesto, ausencia de Luz o discriminación de la Luz. El principio discriminador es además, por esencia, el modo de funcionamiento propio de la conciencia en la personalidad, que puede llamarse como sabéis, cuerpo de deseo, cuerpo astral, cuerpo mental, cuerpo físico también, al igual que cuerpo energético. Cualesquiera que sean los nombres que se les dé, pertenecen en definitiva, a lo que se llama la estructura de la personalidad.

Establecerse en el Corazón del Uno, permite ver más allá de las apariencias del cuerpo, más allá de las apariencias de la energía, más allá de las apariencias de las emociones, más allá de las apariencias de la mente, de cualquier personalidad con la que se entra en conciencia. Por supuesto, aquél que vive en su aislamiento, no puede concebir o incluso aceptar esto. Solamente cuando el cuerpo de deseo comienza a volverse hacia el Espíritu, cuando el alma comienza a dar la espalda al cuerpo para volverse al Espíritu, es cuando existe un impulso del alma a querer experimentar y sobre todo a querer encontrar o, cuando menos, acercarse a un Ser que ha realizado el Corazón del Uno. De todas formas y tal como sabéis, acercarse a un Ser como este, no hace vivir a uno mismo el Corazón del Uno. Pueden existir mecanismos llamados milagros o curaciones espontáneas, que pueden sobrevenir en estas circunstancias particulares y que pueden en aquél que está en su conciencia de la personalidad, propiciar un momento de Gracia, un momento de Unión.

El CRISTO lo ha realizado durante su vida y yo diría que todos los seres (hombres, mujeres, cualquiera que sea su país o su religión), que han realizado el Corazón del Uno, lo han hecho independientemente de su propia voluntad. No ha habido, creedlo, en ningún momento (tanto en el CRISTO como en todos aquellos que han vivido este Despertar), cualquier voluntad de lo que sea, en relación a la conciencia dividida, que se acercara a Ellos. Simplemente la Gracia hace que cuando el Corazón del Uno está establecido en una persona, en ese momento, todo el Universo se aproxima al Corazón de todos. Aunque no sea perceptible para las conciencias separadas y encerradas, existe de todas formas, en ese momento, la posibilidad de la Gracia y existe en ese momento, la posibilidad de Comunión de ese estado de Conciencia. Esto os lo ha explicado con otras palabras el Arcángel ANAEL, hace poco tiempo, relativo a este pasaje de las Bodas de Luz individuales, a las Bodas colectivas de la humanidad. Así, Vivir el Corazón del Uno va a llevaros gradualmente, a poner fin a todas las separaciones existentes. Cuando veáis a otro Hermano, a otra Hermana, no veréis más un hombre y una mujer, no veréis ya una edad, no veréis ya una profesión, no veréis nada que participe de la personalidad, sino indiscutiblemente, percibiréis al otro más allá de lo que él puede concebir o imaginar, pero porque está inscrito directamente en vuestro propio Corazón. Así, cualquier fenómeno de proyección va a cesar. Lo que se ve con los ojos no se considera como la Verdad. Lo que se percibe con los sentidos no se considera como la Verdad. Pero lo que se vive con la Conciencia del Corazón del Uno, innegablemente os va a permitir Vivir el Corazón de Todos y Ver el Corazón de Todos.

Este principio, lo desarrollo particularmente ahora, porque efectivamente, a través de todas las enseñanzas os proporcioné, a través de los diferentes Yoga (ndr: desarrollados en la rúbrica “protocolos” del sitio), vais a ver la posibilidad real, por la Conciencia directa que se ha instalado, de Vivir este proceso, sea de forma brutal, como lo he vivido yo en mi última vida, en plena noche, sea de manera gradual, a medida de vuestros reencuentros, de vuestras experiencias. Sean las que sean las experiencias que se os han dado a vivir, recordad, como se os ha dicho, que absolutamente todas las circunstancias, todos los encuentros, todos los hechos, todos los gestos que vais a experimentar en este periodo, no participan más que de una sola cosa y una sola: haceros descubrir el Corazón del Uno. Aunque os parezca paradójico, aunque os parezca con vuestra razón, totalmente opuesto a vuestro concepto de la Unidad, recordad que la Unidad y La Fuente no tienen nada que ver con vuestras concepciones. Ellas os llaman de todas las formas posibles, a realizar el Corazón del Uno. Realizar el Corazón del Uno, lo sabéis, es realizar uno de los Samadhi, es realizar una de las etapas de estos Samadhi, a nivel de percepciones Vibratorias y también, por supuesto, de la Conciencia que es conjunta. Esto parte simplemente, de la presión existente a nivel del trayecto que va de Humildad a Simplicidad, en el pecho, llamados también chakras de Enraizamiento del alma y del Espíritu, pasando por los fenómenos de Vibraciones, de presiones, de opresiones, hasta vivir el Fuego del Corazón que, cuando lo viváis, no podrá dejar lugar a ninguna duda en lo que estáis a punto de Vivir. Porque más allá de la vivencia de vuestra Conciencia, os daréis cuenta real y concretamente, que la distancia que podía existir entre vosotros y los otros tenderá a interrumpirse.

¿Y es que por eso, os convertirá en alguien que estará, yo diría, en la complacencia o la dulzura? No, en absoluto. Porque el Fuego es algo que emana, que Irradia y que a veces trastorna, molesta y quema a aquél que todavía está instalado en el fuego de la personalidad. El Fuego del Corazón es lo opuesto del fuego del ego. Así como os ha demostrado y mostrado HERMANO K, es evidente que vivir el fuego del ego será reforzado para aquellos que están en el Fuego del Espíritu y que se encuentran a vuestro lado: aquél que está en el fuego del ego se va a encontrar reforzado en su fuego del ego. Pero acordaros de que el fuego del ego, cuando se intensifica, permite también aproximarse al Fuego del Corazón, por medio de la Puerta Estrecha. Existe en efecto, una distancia que tiende a estrecharse por el hecho mismo de la presencia de esta Puerta Estrecha que se ha abierto entre el ego y el Corazón. El fuego del ego no es el Fuego del Corazón, pero es algo que puede hacer creer que hay mecanismos de Unidad. La Unidad aparece ciertamente, desde el momento en que vuestra Corona Radiante del Corazón o el Fuego del Corazón, o los mecanismos particulares Vibratorios (concernientes al Corazón, la respiración, la Conciencia, de manera conjunta), comienzan a manifestarse.

Entonces, en ese momento, penetrando el Corazón del Uno, ¿qué pasa? Vivís estados de conciencia profundamente modificados. Más allá incluso del fin de la separación, se establecen estados de Alegría interior, estados de disolución, estados de serenidad, estados de ecuanimidad, o en ese momento como sabéis, la mente, la emociones, no pueden ya tomar la delantera en lo que os habéis convertido. Abrir el Sí mismo y realizar el Sí mismo permite tomar los mandos de los vehículos inferiores. Tomar los comandos no quiere decir reprimirlos. Tomar los comandos no quiere decir contradecir un deseo. Simplemente cuando realizáis el Yo, percibís muy rápidamente, que todos los deseos de la personalidad se apagan brutalmente o gradualmente. El hecho de que el cuerpo de la personalidad no exprese más deseos revela el estado de la Conciencia del Yo.

La Conciencia del Yo procura también la ausencia de emoción. La usencia de emoción no es un estado de frialdad, no es un estado de rechazo, sino al contrario, un estado de apertura pacífico, donde no existe más interacción del cuerpo de deseo y de personalidad, que justamente va a permitir realizar que, en el Corazón del Uno que habéis vivido, vosotros realizáis el Corazón de Todos. La ausencia de separación, la ausencia de división existente, para aquél que encuentra el Sí mismo, se ha manifestado de diferentes formas, en las diferentes tradiciones, en las diferentes religiones y en las diferentes épocas.

La época que vivís hoy, en este final exclusivo, corresponde a un proceso que supera largamente la individualidad, que supera largamente el camino personal, ya que se trata de un camino que es, de ahora en adelante colectivo y que concierne a la totalidad de la Tierra. Las etapas que hay que Vivir ahora, y que se han instalado (desde la intervención de la que se llama MARÍA), permiten entrar verdaderamente en Conciencia en las etapas, que muchos profetas, muchas profecías, os han anunciado. No perdáis de vista de todas formas, que las profecías siempre han anunciado lo que veían y lo que percibían, cualquiera que sea su estado Unitario, en función de su propia Conciencia, en el momento en que vivieron cuando estaban encarnados, si se puede decir. Y que evidentemente, esta Visión de un futuro que ha llegado ahora, estaba coloreado por su propia cultura, por su propia referencia y por sus propias experiencias. No olvidéis tampoco, como los Ancianos, las Estrellas y los Arcángeles os han dicho, que habéis realizado un trabajo considerable. A través de la constitución de la Mekabah Interdimensional colectiva, habéis modificado la forma en que la Conciencia de la Unidad iba a instalarse sobre este mundo y permitir a la Tierra vivir su Liberación. En resumen, desde hace un año, habéis logrado por vuestra asiduidad (aun sin llegar a vivir la Conciencia del Yo, totalmente) a movilizar vuestra Conciencia y todas las Conciencias de la Tierra (lo sepan ellas, o no), a vivir una Elevación Vibratoria. Esta Elevación Vibratoria concurre de ahora en adelante, si obráis en el sentido en que el Arcángel ANAEL os ha dicho, a permitir que esta Revelación de la Luz y esta última fase de la Luz, transcurra de manera mucho más pacífica y serena, para vosotros y para todos los demás, porque justamente, habéis completado este trabajo. Por supuesto, lo hemos completado juntos, pero nosotros no hubiéramos podido completarlo si vosotros no estuvierais aquí y si no lo hubierais completado al mismo tiempo.

Así pues, lo que se va Vivir ahora es la Esperanza. Lo que se va a Vivir ahora, es la Alegría, lo que hay que Vivir, es no escuchar más el cuerpo de deseo (si todavía está presente) para beneficiarse al máximo, de los influjos de la Luz Vibral, de la Llamada de la Luz y de realizar exactamente vuestras propias Bodas de Luz. Esto debe ocuparos yo diría, a tiempo completo, porque los tiempos son extremadamente reducidos y no os hemos ocultado nunca que el tiempo que os queda por pasar en esta Tierra, son los tiempos más intensos qué vais a vivir. Esta intensidad se manifestará por cierto, de todas las formas posibles. Recordad lo que os he dicho, en este instante: cualquiera que sea la intensidad de esos momentos (sean los más terroríficos o los más felices), concurrirán a vuestro nivel, a estableceros en el Yo. Y una vez establecidos en el Yo (ya que el pasaje de la Puerta Estrecha se va a hacer, yo diría, cada vez con más facilidad, en el decurso y a través de un conjunto de manifestaciones que os conciernen, en vuestra vida y en vuestro entorno), entonces, en ese momento, rasgando los velos en vuestro Interior, realizando esta Unidad y el Corazón del Uno, vais a percibir que os hacéis el Corazón de todos.

Vivir el Corazón de todos es el corolario del acceso a la Unidad. No ponéis más separación, no tenéis más deseo propio, porque vuestro único deseo es estableceros en el Yo. Y, estableciéndoos en el Yo y aprovechando esos instantes en que vivís ese Alineamiento, en que vivís el acceso a la Conciencia llamada Turiya, entonces, en ese momento, vais a Despertar todos los Corazones de todos. Vais a hacerles franquear (más allá de la percepción consciente de las Conciencias de todos), una octava suplementaria y vais a aproximarles realmente, a ellos también, a su Puerta Estrecha y a sus mecanismos de Revelación de la Luz. Cualquiera que sea su camino ulterior, lo sabéis, todos los Hermanos y Hermanas encarnados, deben vivir este Reencuentro con la Luz. No puede haber Liberación sin Reencuentro con la Luz. No puede haber fin de lo que se llama disociación y de la conciencia de la personalidad, si no hay concienciación de la Luz. Esta concienciación de la Luz no debe llevaros a hacer juicios sobre lo que vive aquél que está en frente de vosotros, sea lo que sea, porque él también, vivirá su Reencuentro con la Luz, realice el Yo o no.

Este pasaje es, de alguna forma, un pasaje obligatorio y obligado. Este pasaje es el mecanismo en permite justamente, el fin de la matriz y la reconexión a La Fuente que yo calificaría de permanente, sea el que sea repito, el devenir. Acordaros de lo que os han dicho muchos Arcángeles: la Liberación de la Tierra es total. No hay una Conciencia en esta Tierra, no hay un Corazón, que permanezca aislado y encerrado. Por supuesto y como sabéis también, cada uno tiene sus propias experiencias que vivir, cada uno tiene su propia libertad. No es cuestión de imponer la Luz. Es simplemente cuestión de que cada uno tome conciencia de lo que Es la Luz. Y no tenéis que decidir. Os recuerdo que cuando estáis en el Corazón del Uno, en el Corazón de todos, vais a percibir en ese momento (más allá de vuestras proyecciones y de vuestros deseos), lo que desean el Espíritu y el alma de aquél que está ante vosotros. Vais a ver realmente, más allá del cuerpo de deseo y de todos los juegos de interacciones emocionales, mentales, de proyección, de afectos y otros). Y verdaderamente vais a ver el Corazón desnudo, de todos y cada uno.

La realización del Yo os lleva, como se ha dicho, a romper las barreras Dimensionales. La instalación del Canal de MARÍA o de las Estrellas, a vuestra izquierda, es uno de los elementos mayores que os sostienen y respaldan y que permiten ayudaros. Como os hemos dicho, estamos a vuestro lado, no podemos dar el último paso en vuestro lugar, pero podemos asistiros, podemos acompañaros y ser los testigos privilegiados de vuestra Resurrección. Lo que viene ciertamente, es la Resurrección. Lo que viene es un nuevo Nacimiento, un Nacimiento donde no existirá más la muerte, un Nacimiento donde no existirá más el sufrimiento, un Nacimiento donde solo existirá la Alegría del Yo, donde solo existirá la Luz. Por eso y efectivamente, nosotros os lo hemos dicho también, hay algunos duelos que hacer. Esos duelos los habéis hecho con más o menos felicidad, sin buscar desembarazaros, sino porque la Luz, por su Inteligencia y por su Presencia, más y más importante, igualmente hace desaparecer como sabéis, todas las Ilusiones.

A menudo hemos dicho (en cualquier caso para aquellos de los Ancianos que han estado más frecuentemente en Oriente que en Occidente), que este mundo era una Ilusión, en su totalidad, y que era en esta Ilusión donde debíais realizar el Yo. Entonces, esto no es una palabra vacía, tampoco la adhesión a cualquier concepto religioso o filosófico, sino que realmente es una vivencia que experimentaréis en el momento de Vuestro Reencuentro con la Luz, y en el momento en que realicéis vuestras Bodas de Luz individuales y donde os estableceréis de manera casi permanente, en el Corazón. En ese momento, haciéndoos el Corazón del Uno, seréis directa y efectivamente, ligados o conectados de manera Eterna a La Fuente. Lo que os permitirá Ver más allá de la Ilusión, es decir, transcender las Ilusiones, penetrar la visión Etérica y la Visión del Corazón y recibir al otro en vuestro Corazón. Cualquier mecanismo de proyección cesará entonces.

Desde hace algún tiempo los Arcángeles y muchos de nosotros, os decimos que estamos en vuestro Interior. Esto no es una ilusión. Es la estricta Verdad, que queda por concienciar. Cuando comprendáis que sois la totalidad de los mundos, cuando comprendáis que no sois el límite de este cuerpo, este pensamiento y esta vida, mucho más allá de todas la vidas, sino que sois algo que no pertenece a este mundo (y que por el momento, para aquellos que no han realizado el Yo, os es totalmente Desconocido), todo absolutamente todo, se hará conocido. Pero hace falta aceptar perder lo conocido. Hace falta aceptar dejar todo lo que tenéis. Hay que aceptar que todo se cumpla en vosotros para que realmente, vosotros seáis Realizados. Os recuerdo que yo mismo, como otros Ancianos, hemos vivido este mecanismo de Despertar con un sufrimiento extremadamente intenso. Ese fue el caso también para HERMANO K, como para mí y para algunas Hermanas, algunas Estrellas, que os han hablado. Recordad que la intensidad de lo que se vive en la separación es un elemento que paradójicamente, se va a aproximar a vuestro estado de Yo y de Unidad. Si aceptáis este principio, no hay ninguna razón que lo que os impone la Luz, sea un mecanismo que implique un rechazo de lo que sea. En la aceptación de todo lo que se presenta, es donde debéis encontrar la Transcendencia. Por supuesto, es muy difícil para la personalidad, comprender y aceptar que un elemento, a veces penoso, relativo al cuerpo o relativo a lo que tenéis que vivir, pueda ir en el sentido de la Luz. Se os pide no concebirlo, se os pide no buscar comprenderlo o explicarlo, sino simplemente asentir a esta Transcendencia, porque si vais más allá de la necesidad de comprensión, si vais más allá de la necesidad de reparación (del cuerpo o del sufrimiento), entonces, en ese momento, os abriréis más fácilmente a la Luz, porque el CRISTO vuelve. Os abriréis cada vez más fácilmente a la Luz, ya que la Puerta posterior de CRISTO está abierta y ya que MIGUEL y todo el Conclave, vuelven a perforar vuestro Corazón. Esto se realiza después del inicio de las Bodas de Luz.

Por supuesto, no sois sincrónicos en relación a esto. Algunos viven el Canal de MARÍA y las Presencias a su lado. Otros, mucho más sensibles, solo viven estos contactos por la noche, para que la conciencia de la personalidad no sea perturbada en ninguna medida. Otros en fin, se encuentran y se encontrarán cara a una prueba de este cuerpo o de su vida, a veces considerada como mayor. Pero id más allá de las apariencias, entrad todavía más profundamente en vuestro Corazón. Tratad de no reaccionar en el instante. Tratad de no apegaros a vuestro sufrimiento. Tratad de no apegaros a vuestra contrariedad. Id más allá. En ese momento (y sobre todo en ese momento), decís bien que ese momento no puede ser en definitiva, más que una Llamada de la Inteligencia de la Luz, para volveros a centrar, para realinearos y para franquear el paso. No hay nada más detrás del sufrimiento que concebir y superar este propio sufrimiento. Pero el sufrimiento os llama también, a no querer a cualquier precio, reaccionar contra sino más bien, actuar en. Ciertamente y sobre todo en Occidente, habéis tenido muchos místicos que han hecho aparecer el sufrimiento como el Amor. Verdaderamente, no es cuestión y esto se ha dicho, de auto flagelarse o de buscar sufrimiento, sea el que sea. Pero las circunstancias de la vida en la Tierra se hacen tales, con el aflujo de la Luz, que muchas cosas deben cambiar en el Interior de cada una de vuestras vidas, llamándoos y llevándoos de la mano, por la fuerza, a vivir lo que tenéis que vivir, es decir el Reencuentro con la Luz. La expresión de nuestro Comendador (ndr: O.M. AIVANHOV): “a golpes de martillo”, corresponde exactamente a esto.

Donde estéis, no podréis escapar a la Luz, de cualquier forma. Simplemente, las condiciones de la integración y de la vivencia de la Luz serán profundamente diferentes para cada uno, pero esto no os corresponde. Lo que percibáis, incluso estando realizado el Yo, estando en el Corazón del Uno, teniendo acceso al Corazón de todos, justamente tenéis que favorecer por vuestro estado, el acceso a este Reencuentro. Y es esto lo que es el sentido de Servicio y del Amor, hoy. Pero no podréis hacer vosotros tampoco, un camino en lugar de otro. Como os hemos dicho, es la Conciencia en sí misma la que decide pasar del ego al Corazón. Y nada, absolutamente nada de exterior, puede intervenir en este mecanismo. Es un Reencuentro. Este Reencuentro es uno de los elementos, mayores y motores, de la Ascensión. La Fuente os ha hablado de ello, hace algún tiempo. Habéis llegado a estos tiempos en que ya no es momento de acordarse de la Promesa y el Juramento, sino que ha llegado el momento de vivirlo de manera total. Esta manera total, una vez más, están en un calendario muy corto y en ese calendario tan corto, cada uno de vosotros a su propio ritmo, a su propio Reencuentro. Pero considerad que, cualquiera que sea lo que ocurra en la vida de vuestra Ilusión, lo que se manifiesta con fuerza, a veces, en esta Ilusión, es estrictamente el elemento que os hace falta a cada uno, para vivir el Corazón del Uno. Si aceptáis ese principio, entonces Viviréis el Reencuentro y os estableceréis en vuestro Corazón.

Las consecuencias del Reencuentro, si se las puede llamar así, son evidentemente, totalmente libres para cada Conciencia. Pero vosotros que tenéis la oportunidad, la suerte, de vivir los Estados Vibratorios (esos Estados Vibratorios, los que sean, sean completos, intermitentes, que sean vagos estremecimientos, como de intensidad extrema), todos sin ninguna excepción, tenéis la Gracia de poder Vivir la Gracia. Así que, en los momentos en que esto se presente, recordad mis palabras porque en esos momentos es cuando habrá que ponerlo en práctica: no volver a descender a nivel de la personalidad, no dar cuerpo y dar conciencia a vuestro propio sufrimiento, no dar cuerpo y conciencia a este cuerpo (aunque se realice la alquimia en este cuerpo), no dar cuerpo y no reaccionar a vuestro entorno, (y en particular, al más próximo que, por supuesto y así como se ha dicho, va a hacer cualquier cosa para alejaros de vuestro estado de Gracia y esto, también es lógico.

Recordad que solo existen dos Fuegos durante este periodo: el Fuego del ego (y el miedo del ego) y el Fuego del Corazón (y la apertura del Corazón). Aquél que permanece en lo conocido (y no quiere vivir lo Desconocido), que está establecido en una cierta forma de seguridad (sea profesional, material, afectiva u otra), no tiene ningún deseo, ni ninguna voluntad de vivir otra cosa que aquello en lo que está bien. Y si vivís el Yo, el Corazón del Uno, entonces, en ese momento vosotros asentiréis a lo que el Corazón de todos (y de aquellos que están a veces, más cercanos) no esté en la misma disposición que vosotros, ni en el mismo destino y porvenir que el vuestro. A partir de ese momento, cuando hayáis aceptado, digerido, os acercaréis verdaderamente a la vivencia del Corazón del Uno. Y os aparecerá entonces lo que es el Corazón del otro, que está ante vosotros y que por lo tanto, a priori, parece querer otra cosa que vuestro bien, porque su bien no es vuestro bien y el bien de cada uno no puede ser definido más que por una visión de valores que es propia de cada personalidad.

Existen como sabéis, objetivos comunes, atracciones comunes (sean afectivas, sexuales, profesionales u otras) pero, más allá de esto, existe un Corazón común. Y si vais más allá de las apariencias y si recordáis lo que acabo de decir y persistís en ir hacia vuestro Corazón, Abandonándoos totalmente, entonces podréis percibir que el Corazón del otro no es nada más que el reflejo de vuestras propias resistencias. Entonces, percibís con estupor y os dais cuenta de que el otro, solo es una parte de vosotros mismos que no ha sido integrado. En ese momento, pasará cualquier cosa de particular: la Conciencia del Yo, que había aflorado se transformará en un mecanismo muy invasor, haciéndoos percibir al otro más allá de la Ilusión, más allá del sufrimiento, más allá de las palabras más allá de la apariencia. Y constataréis entonces, que lo que acabo de afirmar es la estricta verdad que hay que vivir en vuestro Corazón. No hay enemigos. No hay amigos, no hay padres, no hay hijos. Hay Corazones que se han reunido en el Corazón del Uno y que, sin embargo, se expresan a través de las máscaras de las personalidades.

El Corazón del Uno es el Corazón de todos. Así, CRISTO ha podido deciros: “amaos los unos a los otros como yo os he amado”. Como él os ha amado, no es un amor humano sino un Amor divino. Lo que hoy tenéis que manifestar, crear, co-crear en lo que se instala, es este Amor. Este Amor que no está disfrazado por la máscara de la personalidad, por la máscara de los deseos, por la máscara de las visiones, de la seducción y de la atracción sino que es el Amor más puro, el más auténtico y el más real que podáis vivir. Y esto solo se instala a partir del momento en que asentís. El Abandono a la Luz, también es esto y específicamente, durante este periodo. Lo que quiera que la vida os envíe, lo que la vida os haga vivir, es justo, porque es lo que tenéis que vivir para abriros y realizar el Yo, totalmente. El otro, ningún otro, puede ser vuestro enemigo. El otro no es más que un reflejo de vosotros mismos, en algo que no habéis integrado y que habéis proyectado al exterior.

Así que, si os establecéis en el Yo, totalmente, no puede existir enemigo ni existirá ya enemigo. Si estáis establecidos en el Yo, nada más puede oponerse al Yo, sea lo que sea que toque vuestro cuerpo, sea lo que sea que toque vuestra vida, cualquiera que sea el sufrimiento que os toque, vosotros sois el Yo y no sois ya el sufrimiento. Siendo el Corazón del Uno, sois el Corazón de los otros, el Corazón de todos y en el Corazón de todos los otros. En ese momento, no hay más razón de que cualquier ilusión pueda alterar lo que sea en lo que sois: no sois y el sufrimiento que vivís, no sois ya ese cuerpo, sin embargo es vuestro Templo en el que vivís. En ese momento, real y concretamente, habéis realizado el Yo. Ya no podéis ser afectados y sin embargo estáis en el Amor más total. No podéis ser desestabilizados más, y sin embargo, estáis estabilizados aunque sea lo más invisible para aquellos que descuidan el Yo y rechazan el Yo. Porque esta estabilidad no es el reflejo de una confianza, no es el reflejo de una voluntad sino simplemente es el reflejo que un Amor que es invisible a aquellos que están encerrados en su cuerpo de deseo y su personalidad.

Si vosotros alcanzáis el Yo y si realizáis ese Yo, Serviréis y estaréis en vuestro sitio justo, en relación a lo que habéis venido a hacer en esta Tierra, en este periodo, en relación a lo que vivís, en alguna de vuestras Coronas, en vuestra Conciencia y en vuestra vida. Recordad: vosotros no sois de este mundo pero estáis en este mundo. Y estar en este mundo es aceptar no ser ya de este mundo. Es redescubrir la Humildad más íntegra, redescubrir la Simplicidad porque, efectivamente las circunstancias globales de la humanidad son lo que son. Y no son más que el reflejo de la disgregación de estas fuerzas de separación, por la acción de la Luz Vibral que, como sabéis, se densifica cada día, cada minuto un poco más. No tenéis pues nada que considerar, ni de la Tierra, ni de los Hombres, ni de vosotros mismos. Solo en la aceptación y la confianza de vuestro Yo encontraréis todos los factores de superación. Pero no encontraréis jamás un factor de superación en la personalidad.

Recordad que solo en las circunstancias más extremas el Hombre redescubre su humanidad. Estas circunstancias extremas (sean los pueblos, sean los lugares, cualquiera que sea cada vida) serán ciertamente, muy diferentes para cada uno, pero serán extremas para toda la humanidad. Y es esto justamente, lo que os va a conducir a vivir el Yo y a hacer vivir el Reencuentro con la Luz, para todos los Hermanos y Hermanas que no están todavía en el Corazón del Uno sino que están en su propio Corazón, encerrados. El fin del encierro, es esto. El mecanismo de pasaje del Corazón del Uno, al Corazón de todos, os hará daros cuenta y concienciaros de que nada está separado, que los Velos de las ilusiones, que os separan, no hacen más que poneros frente a parcelas de vosotros mismos que, como he dicho, no han sido integrados. La ley de Atracción o la ley de Gracia, no puede poneros delante, más que lo que habéis creado. Si tenéis miedo de ser robados, seréis robados. Si ponéis en marcha técnicas para evitar el robo, seréis robados. Pero si pensáis y vivís que el robo no puede existir, no seréis robados nunca. Si realizáis el Amor según estas condiciones, si os concienciáis y vivís que cualquier forma de vida que está delante de vosotros, posee y vive un día, el mismo Amor que vosotros, entonces no habrá separación, y pasaréis de vuestro Corazón al Corazón del Uno, y del Corazón del Uno al Corazón de todos. Es esto lo que estáis llamados a vivir.

El periodo del Reencuentro ha llegado. Se os había anunciado ya, desde hace dos años. Habéis vivido algunos elementos que os han acercado y quizá, para algunos de vosotros, alejados de este Reencuentro. Pero, cualquiera que sea el acercamiento o alejamiento, todo concurre en definitiva, a haceros vivir lo que tenéis que vivir. No puede ser de otra forma en el Yo. No puede ser de otra forma en la Inteligencia de la Luz. Así, todas las circunstancias que la vida os proponga son para haceros vivir lo que habéis creado. Si habéis creado la Gracia, viviréis la Gracia. Si habéis puesto fin a las separaciones, viviréis el fin de las separaciones. Si habéis desposado la no violencia, viviréis la no violencia. Si habéis desposado el Amor, viviréis el Amor. Si habéis transcendido la identificación a los sufrimientos, el sufrimiento no existirá más. Si habéis transcendido los miedos de carencia, sea el que sea, no viviréis la carencia, aunque deba pasar por mecanismos llamados milagros. Como decía CRISTO: ¿“se preocupa el pájaro por lo que va comer mañana”?

Vosotros debéis demostrar y mostrar que sois la Luz para vivir el Yo. Porque ¿cómo podéis prever e imaginara prever, y prevenir lo que sea y vivir la espontaneidad de la Luz? si queréis instalaros en el Corazón del Uno y en el Corazón de todos, no hay otra alternativa. Hay que pasar la Puerta, estableceros en los 4 Pilares y elevaros en esta columna de Luz. eso es lo que hay que vivir ahora, a partir de la instalación de las Bodas de Luz en la Tierra, que deben llevaros a cada uno, a preparar esas Bodas colectivas, que vendrán (como se os ha dicho) en un momento en que no lo esperáis. Las únicas primicias, las conocéis, han sido reafirmadas por el Arcángel Anael, repetidas en numerosas ocasiones por María: se trata por supuesto, del Canto del Amor. Cualquiera que sea el Canto (sea de la Tierra, del Cielo, sea el de los Ángeles, sea el de vuestro Espíritu), se trata en definitiva, del mismo Canto que es el Canto de la Unidad. Seréis avisados por esto. Cuando el Canto de la Unidad se generalice, entonces sabréis que los tiempos se han cumplido totalmente. No para vosotros, sino para la colectividad. Os quedarán entonces, muy pocos días para realizar el Yo pero es en esos momentos, en esta urgencia, cuando muchos de vosotros vivirán esto.

Así que, os pedimos a cada uno de vosotros recordar estas palabras porque en este periodo es cuando existen las mayores oportunidades. Las Puertas del Cielo se han cerrado para abrirse en la Tierra. Así, el impulso de CRISTO, que ha realizado las Bodas de Luz (que muchos de vosotros han percibido, en ese día del 26 septiembre de este año), está llamado ahora, a concienciarse más y más. El canal de MARÍA se va a manifestar cada vez más frecuentemente, a vosotros. Las Vibraciones van a comenzar a invadir la totalidad de vuestras células. Como el amado SRI AUROBINDO describió durante su vida, como HERMANO K os ha hablado: lo desconocido ha llegado ahora. Entonces, liberaos de todo lo que conocéis. Liberaos de todo lazo, sin por eso dimitir de lo que sea. Debéis en efecto, en el Amor, no separar nada, no dividir nada, no cortar nada. Algunos de vosotros, hace años han vivido cortes, separaciones, cambios. Si hoy estáis en tal circunstancia, con tal persona, con tal ser, con tal situación, es que habéis elegido estarlo. Entonces, ahora no es tiempo ya de separarse sino que es tiempo de reunificarse y de aceptar todo lo que habéis creado, para este periodo que estáis a punto de vivir. Porque es en estos elementos (que pueden a veces pareceros opuestos a vuestra Liberación) donde se encuentran justamente, los elementos de vuestra propia Liberación.

Acordaros de estas palabras porque, ahora y cada día, vais a percibir (si vais más allá de las apariencias) que es exactamente lo que está a punto de producirse en vuestra vida, en vuestro cuerpo, en vuestras relaciones y en lo que vosotros estáis haciendo en este momento. Vivir el Corazón del Uno, es vivir el Corazón de todos. Por eso, es necesario que aquél que os hace frente y que está en la oposición a lo que sois vosotros, solo esté ahí, para permitiros resolver y solo está ahí para permitiros ser, de alguna suerte, un trampolín, que es el espejo de vuestros propios fallos Interiores. Entonces, en ese momento, si aceptáis esto, descubriréis el Amor, tal como había hablado el CRISTO y tal como lo ha vivido. En ese momento, os amaréis los unos a los otros, como él os ha amado, y realizaréis en su totalidad el estado CRISTO. Nosotros no podemos nada, nosotros Ancianos desearos nada mejor que esto. Ese mecanismo es un mecanismo muy simple. Por supuesto la personalidad lo va a considerar fuera de lugar y hará lo que sea, en vuestro Interior, por medio de vuestros allegados o de situaciones, para dar la espalda a esto. Esto se ha llamado también, de otra forma: la Noche Oscura del alma. Pero la Noche Oscura del alma (este sufrimiento extremo que puede manifestarse en el cuerpo que habitáis, como en algunas de vuestras relaciones) solo tiene un objetivo: despertaros. Entonces no juzguéis. Aceptad y elevaos. Pasad de la conciencia que sufre, a la conciencia que está en Alegría. Y solo vosotros podéis hacerlo. Y las Puertas están muy abiertas.

Esta Puerta, llamada Estrecha, se abrirá cada vez más majestuosamente, a medida que avancéis hacia ella. Queda muy poca distancia entre la Crucifixión y la Resurrección. CRISTO ha resucitado al 3er día. Estos 3 días los conocéis. Muchos intervinientes os han hablado. Algunos de vosotros lo habéis vivido con anticipación, aunque la duración de los 3 días no es, en este momento, más que simbólico. Pero es tiempo ahora, de Resucitar. Todos los elementos se os han dado. Todo el Yoga de la Unidad, todo lo que era posible, espiritual y humanamente, comunicaros se os ha comunicado en su totalidad (ver las rúbricas “protocolos” y “mensajes para leer” de nuestro sitio). Nosotros estamos a vuestro lado. Nosotros estamos con vosotros y, si lo deseáis, nosotros estamos en vosotros. Entonces, vivir del Corazón del Uno al Corazón de todos, no es más que un pasaje: un pasaje de la Conciencia que si lo aceptáis, os pondrá en Alegría y os hará vivir lo que sois, es decir los Seres de Alegría. Por eso, no hay que separar nada, nada que dividir y amarse los unos a los otros. No hay otra alternativa. Pero esto debe ser un impulso del Corazón y no un impulso de la personalidad. Debe ser un Abandono de la personalidad. Debe ser un asentimiento a la Luz. Debe ser, como se ha dicho hace poco tiempo, un “sí” a la Luz (ndr: Canalización de MA ANANDA MOYI del 27 septiembre 2011). Y ese “sí” a la Luz se acompañará de manera sincrónica, si no simultánea, de la Realización de la Conciencia del Yo.

La época que se vive en la Tierra hoy, es una época (quizá lo sabéis) donde infinitas Conciencias han deseado encarnar. Incluso aquellas que eran las más libres y las más altas, que no pertenecían de ninguna forma a los mundos antropomorfos, por lo que la Conciencia se ha establecido mucho más allá de lo que os es aceptable. Porque, efectivamente, el Pasaje, esta Reversión, este último Pasaje de la Puerta Estrecha, es algo que la Conciencia vive en el Amor más total: la Realización del Yo (o la disolución en la Luz Una) es un elemento que es lo más intenso que la Conciencia pueda vivir. Y es a esto a lo que la Luz viene a llamaros. Que esta Luz pase a través de vuestro cuerpo sufriente. Que esta Luz pase a través de un allegado en oposición con vosotros, o por una circunstancia de la vida o un azar de la vida. Sea lo que sea, el periodo que vive la humanidad, no está destinado más que a una sola cosa y a una sola.

Recordad que no existe ninguna retribución. Recordad que no existe ningún juicio. El único juicio sois vosotros los que lo hacéis, en función de vuestra mirada y de vuestra conciencia. Ninguna Luz puede juzgar lo que sea. Ningún Ser de Luz puede juzgar nada. El único juicio, en definitiva, no existe más que en el interior de la conciencia separada y dividida. Superar y transcender el juicio, es vivir el Yo. Entonces, no juzgar (como se os ha pedido), aceptar, Abandonarse y vivir el Espíritu, es exactamente lo que se os propone para realizar el Yo. Y esto es totalmente independiente de todo lo que se puede producir durante este periodo. Porque durante este periodo, lo que tenéis que vivir, es la transcendencia. Y la transcendencia y la Luz van a utilizar lo que es más adecuado para vosotros, porque lo que se instala en la Tierra es la ley de Gracia. Y la ley de Gracia es la ley de Atracción. Esta ley de Atracción (mucho más allá de la acción /reacción) va a haceros vivir la Unidad, la sincronicidad de la Unidad, la Fluidez y, sobre todo os va a hacer descubrir el Yo. En ese momento, os convertiréis el Corazón del Uno, por el Corazón de todos. Esto es lo mejor que yo puedo desearos.

Tomemos algunos minutos de comunión, antes de que os dé la palabra, si hay cuestiones. Pero hagamos primero juntos, silencio. Hagamos primero juntos, comunión de Corazón a Corazón.

… Efusión Vibratoria…

Hermanos y Hermanas, en el Corazón del Uno, si surgen algunas preguntas, os escucho.

Pregunta: ¿el único objetivo de la vida humana en la Tierra no es realizar el Corazón del Uno?

Hermano mío, no, porque algunas almas buscan, con avidez, la experiencia de la materia. En este sentido hay que respetar. Como os ha dicho CRISTO: “hay muchas Moradas en la Casa del Padre”. También hay como sabéis, numerosísimos orígenes estelares, numerosísimos estados Dimensionales. No conocéis (mientras que estéis en la personalidad) el Corazón del otro. Y conociendo el Corazón del otro (cuando realizáis el Corazón del Uno), entonces entendéis que todo el mundo no puede tener el mismo destino, ni la misma finalidad. Cada ser humano, sin ninguna excepción, es diferente de otro ser humano. La única cosa que les une, que les unifica, que sea la misma, es el Corazón. Todo lo demás forma parte de la diversidad, sin hablar de la separación o de ilusión.

Pregunta: ¿en el momento final, el Fuego del Corazón invadirá el cuerpo entero?

Querida Hermana, algunos lo viven ya desde hace algún tiempo. Este fenómeno de picaduras Vibratorias corresponde a la acumulación de las Partículas Adamantinas, mucho más allá del canal del Éter, mucho más allá de la Corona Radiante del Corazón pero, efectivamente, a escala de todo el cuerpo.

Pregunta: ¿sentir descargas eléctricas o espasmos en el cuerpo, a qué corresponde?

Hermano mío, corresponde a la progresión de la Luz. De igual forma que una enfermedad fulminante, de igual forma que un accidente, en estos tiempos particulares. Todo lo que se produce y lo que se producirá, concurre a la Luz.

No tenemos más preguntas, os damos las gracias.

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