viernes, 30 de enero de 2015
Semilla estelar. Sandalphone y María.
Canalizado por Elsa Farrus
30-01-2015
Amada
niña. Ser semilla estelar, es ser uno con el universo, en un plano dual.
Nada
es fácil, cuando uno se ofrece a caminar en la dualidad para crear unidad.
Solo
el profundo convencimiento y sabiduría interna, de que la unidad es posible:
permite crear unidad en el exterior, a conciencia y a materializar dicho
equilibrio y unidad a cada paso.
Amada hermana de luz,
todos somos semillas estelares en algún plano, en alguna encarnación del alma
en diferentes planos, planetas y realidades.
Ahora os toca a vosotros,
en Gaia, ser la semilla de la conciencia única, en tiempos de mayor discordia.
Si lográis florecer en
esta unidad interna, la vibración de Gaia se ira uniendo a vosotros y permitirá
que todos los seres que eligen corazón, se hallen en paz con sus realidades.
No significa que dobléis a
otros a ser conscientes, o piadosos, o a amar incondicionalmente. No esto no
funciona así.
Significa que al entrar en
contacto con vuestra vibración interna, se alinearan en ella, o bien vibrando
igual, o bien empezando un camino diferente.
La vida es una elección,
siempre es una elección, ya sea consciente o inconsciente. Incluso para
nosotros los que llamáis maestros ascendidos, también sigue siendo aprendizaje
o elección, así nacen los caminos que enriquecen Akasha y a vuestro ser
interno. La experiencia es la base de estar vivo.
Si no os perdéis de nuevo
en las experiencias de los otros, ahora es el momento de sostener únicamente
vuestras vibraciones internas, en vuestro ser, en vuestro físico, en vuestros
hogares, en todos y cada uno de vuestros pasos en el presente y el futuro.
Sois seres de luz en
cuerpos físicos y ambos son la unión perfecta, en vuestro interior de dos
grandes micro mundos, el dual físico y el unitario universal o Alma…etc
Ahora en estos tiempos, ya
no hay separación en ello, por eso notáis tan físicamente las consecuencias o
materializaciones de vuestras decisiones y a mayor velocidad, por esta gran
unificación entre ambos.
Amada niña, se acelera el
tiempo de nuevo, y ahora más que nunca es tiempo de recogimiento en vuestras
actividades, de crear con las manos y de materializar nuevas realidades, para
todos.
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